miércoles, 25 de julio de 2012

Momento



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-"Tú chica me suena mucho.
-A mucha gente le suena mucho.
-¿Qué quieres decir?
-Un máster de Stanford llamado Roy Raymond quiere comprarle ropa íntima a su mujer pero le da vergüenza comprar en un gran almacén. Se le ocurre montar una tienda exclusiva que no te haga sentir un pervertido: pide un préstamo de 40.000 dólares al banco y otros 40.000 a sus suegros y abre una tienda a la que llama Victoria's Secret. Gana medio millón de dólares al año, crea un catálogo, abre tres tiendas más y al cabo de 5 años vende la empresa a Leslie Wexner por 4 millones de dólares, ¿un final feliz no? Salvo que dos años después aquella empresa vale más de 500 millones de dólares y Roy Raymond se tira desde el Golden Gate. El pobre tío sólo quería comprarle a su mujer un tanga de seda.
-¿Eso era una parábola?
-Mi chica es modelo de Victoria's Secret, por eso te suena tanto. No dejes que esto te impresione(ante la cara de sorpresa de Mark), he leído tu blog.
-¡No, no! Aquello era para internautas frikis.
-¿Sabes porqué cree Napster? La chica de la que me colgué en el instituto salía con el segundo capitán del equipo escolar de Hockey y yo quería robársela, así que decidí atacar con el próximo bombazo. Cambié la industria de la música para bien y para siempre. Quizás no resultara un buen negocio pero cabreó a un montón de personal ¿Y no era eso en lo que consistía tu Facemash? Tienen miedo de mí chaval, y ahora van a tener miedo de ti. Los inversores solo quieren decir "buena idea nene, ahora nos encargamos los adultos" pero no esta vez, ¡este es nuestro momento! Esta vez, vas a soltarles una tarjeta de visita que diga "yo soy el presi, mamón", eso es lo quiero para tí"
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Sean Parker, creador de Napster, conversando sobre el potencial de Facebook con su creador, Mark Zuckerberg
(Justin Timberlake y Jesse Eisenberg en La Red Social (2010) de David Fincher)

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