viernes, 30 de noviembre de 2012

Cansancio




-------
"-S
upongo que ha sido importante.

-Dime, ¿por qué no has dejado que Bosko te llevara a casa?
-¿Y estropearle la noche a ellos también? ¿Qué ha pasado?
-Es mejor que no lo sepas.
-Me gustaría saber que oculta esa expresión amargada de tu cara.
-No quiero mezclarte en mis problemas. Vámonos.
-Tú nunca me dijiste que me mantendrías al margen.
-Cuando tú y yo nos enrollamos nena, te dije que ibas a tener que compartirme con todas las personas malas y las porquerías de este planeta.
-Y yo acepté lo de compartir porque te quiero. Te quiero gordo, calvo, con dinero, sin dinero o conduciendo un autobús, no me importa. Pero tienes que estar presente como una persona normal de vez en cuando, eso es compartir. Esto no es compartir, esto son migajas.
-Entiendo. Lo que debería hacer es volver a casa y decir "¡Hola cariño!, ¿adivina el qué? He entrado en una casa donde un capullo yonki acababa de freír a su bebé en un microondas porque lloraba demasiado fuerte y quiero compartir eso contigo" ¡Venga compartamos eso, y al compartirlo conseguiremos catárticamente disipar toda esa mierda atroz!, ¿es eso?. Es un error, ¿sabes por qué?
-Porque tú prefieres la rutina normal: follamos y luego pierdes la capacidad de hablar
-(Hace un gesto como no haciendo caso) Porque tengo que mantener mi angustia, la preservo porque la necesito. Me mantiene en alerta, en el filo, dónde debo estar.
-Tú no vives conmigo. Tú vives entre restos de personas muertas. Siempre filtrando detritos, reconociendo el terreno, buscando huellas de paso, el olor de tu presa, persiguiéndola hasta atraparla. Eso es lo único con lo que estás comprometido. El resto es la confusión que dejas a tu paso. Lo que no entiendo es porque no puedo romper contigo"
-------

Justine Hanna, mujer del detective de policía Vincent Hanna, ante las constantes ausencias de marido 
(Diane Venora y Al Pacino en Heat (1995) de Michael Mann)